martes, 28 de octubre de 2014

EL RESERVORIO Y LA TRANSMISIÓN DEL VIRUS DEL ÉBOLA



El reservorio natural de ebola virus sigue siendo desconocido. Sin embargo, sobre la base de la evidencia disponible y la naturaleza de virus similares, los investigadores consideran que es una enfermedad zoonótica.


En las selvas tropicales de África central, varias especies de murciélagos han mostrado evidencia de infección por Ébola sin enfermarse; y por lo menos una de las especies, el pequeño murciélago de fruta, Myonycteris torquata, tiene un hábitat que se extiende desde África Central hacia el oeste donde se ubica Guinea, el que está asociado al brote actual. En África se han documentado casos de infección asociados a la manipulación de chimpancés, gorilas, murciélagos frugívoros, monos, antílopes y puercoespines infectados que se habían encontrado muertos o enfermos en la selva.

La manera en que el virus aparece por primera vez en un ser humano en el inicio de un brote es desconocida. Sin embargo, los investigadores han planteado la hipótesis de que el primer paciente se infecta a través del contacto con un animal infectado. 

La transmisión de persona a persona es a través del contacto directo con la sangre u otros fluidos corporales. El virus Ébola ingresa al organismo humano a través de superficies mucosas, roturas y abrasiones en la piel, o por introducción parenteral. La mayoría de las infecciones humanas en brotes ocurren por contacto directo con los pacientes o cadáveres infectados Partículas de virus infecciosos o ARN viral se han detectado en el semen, secreciones genitales y piel de los pacientes infectados. El contacto directo ocurre principalmente en establecimientos de salud, entre los familiares que cuidan a un enfermo, o entre las personas que tocan el cuerpo de una persona recientemente fallecida, y si existe un contacto directo a través de la piel lesionada o las membranas mucosas con sangre o fluidos corporales de una persona enferma (orina, saliva, secreciones bronquiales, sudor, heces, vómito, y semen), objetos (como agujas) que han sido contaminados con fluidos corporales infectados, o animales infectados vivos o muertos.

En base a estudios por PCR, se ha podido detectar el virus del Ébola desde un día antes del inicio de los síntomas, y hasta después de fallecido el paciente. Este hecho podría llevar a que igualmente sea posible su transmisión antes del inicio del cuadro clínico de la EVE.

El mayor riesgo de transmisión lo tienen los trabajadores de salud, la familia y amigos en contacto cercano con enfermos de Ébola ya que pueden entrar en contacto con sangre o fluidos corporales infectados.

Durante los brotes esta enfermedad puede propagarse rápidamente en los entornos médicos especialmente en establecimientos de salud, donde el personal que trabaja no dispone de equipos de protección apropiado y en cantidad suficiente, como máscaras, batas y guantes. La limpieza y eliminación de desechos hospitalarios, tales como agujas, jeringas, gasas y otros, también es importante realizarlos adecuadamente a fin de evitar que la transmisión del virus pueda continuar y amplificar un brote.

 Gretchen VogelAre Bats Spreading Ebola Across Sub-Saharan Africa? Science 11 April 2014: Vol. 344 no. 6180 p. 140
Leroy EMKumulungui BPourrut XRouquet PHassanin AYaba PDélicat APaweska JTGonzalez JPSwanepoel R.  Fruit bats as reservoirs of Ebola virus. Nature. 2005 Dec 1; 438(7068):575-6.


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lunes, 27 de octubre de 2014

EL VIRUS ÉBOLA


VIRUS DEL ÉBOLA EN MONO VERDE AFRICANO

EL VIRUS ÉBOLA

La Enfermedad por el virus Ébola es una enfermedad zoonótica, que cursa con diversos cuadros clínicos, incluyendo formas graves. Se manifiesta como síndrome febril hemorrágico agudo, con alta tasa de letalidad.

El virus Ébola es un virus pleomórfico (morfología variable), con envoltura, no segmentado cu­yos viriones suelen presentar formas filamentosas (de ahí su clasificación como "filovi­rus") que pueden alcanzar grandes longitudes (hasta 14 000 nm); sin embargo, presen­tan un diámetro bastante uniforme (aproximadamente 80 nm).

El virus Ébola  fue descubierto en 1976 en lo que hoy es la República Democrática del Congo, cerca del río Ébola, de donde toma el nombre. Este virus pertenece a la familia Filoviridae y género Ebo­lavirus, comprende cinco especies distintas:

     Ebolavirus Bundibugyo (BDBV)
     Ebolavirus Zaire-Ébola (EBOV)
     Ebolavirus Sudan (SUDV)
     Ebolavirus Reston (RESTV)
     Ebolavirus Bosque Tai (TAFV)

Las especies BDBV, EBOV y SUDV se han asociado a grandes brotes de EVE en África. Todos los ebolavirus africanos conocidos pueden infectar a los humanos y causar síntomas similares, pero varían en términos de progresión de la enfermedad y la virulencia, con tasas de mortalidad que oscilan entre menos de 40% de BDBV a aproximadamente el 50% en el caso de SUDV, y  de 70 a 90% para el Ebolavirus Zaire-Ébola. La virulencia de TAFV es difícil de evaluar porque no ha habido un solo caso registrado. La Reston ebolavirus es la única especie asiática identificada, encontrada en Filipinas y China, que causa enfermedad en primates no humanos e hipotéticamente puede causar infección asintomática en los seres humanos.

De acuerdo a sus características, el virus del Ébola se clasifica como agente patógeno del Grupo de Riesgo 4, de acuerdo a la clasificación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), por lo que la manipulación para el cultivo y aislamiento del virus, se requiere de un nivel de bioseguridad 4.

ESTRUCTURA DEL VIRUS:













1.     Anja Wolz, R.N. Face to Face with Ebola — An Emergency Care Center in Sierra Leone. N Engl J Med 2014; 371:1081-1083.
2.     François Lamontagne, Christophe Clément, Thomas Fletcher, Shevin T. Jacob, William A. Fischer, Robert A. Fowler, and M.S.(Epi). Doing Today's Work Superbly Well — Treating Ebola with Current Tools.  September 24, 2014DOI: 10.1056/NEJMp1411310.
3.     M. C. Georges-Courbot, A. Sanchez, C. Y. Lu, S. Baize, E. Leroy, J. Lansout-Soukate, C. Tévi-Bénissan, A. J. Georges, S. G. Trappier, S. R. Zaki, R. Swanepoel, P. A. Leman, P. E. Rollin, C. J. Peters, S. T. Nichol, T. G. Ksiazek. Isolation and phylogenetic characterization of Ebola viruses causing different outbreaks in Gabon. Emerg Infect Dis. 1997 Jan-Mar; 3(1): 59–62. En linea. (Acceso el 01/09/2014). Disponible en: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2627600/
4.     Beer BKurth RBukreyev A. Characteristics of Filoviridae: Marburg and Ebola viruses. Naturwissenschaften. 1999 Jan;86(1):8-17. En línea. (Acceso 01/09/2014). Disponible en:
http://link.springer.com/search?query=Characteristics+of+Filoviridae%3A+Marburg+and+Ebola+viruses.#page-1
5. Rupa Kanapathipillai, M.B., B.S., M.P.H., D.T.M.&H. Ebola Virus Disease — Current Knowledge. N Engl J Med 2014; 371:e18September 25, 2014DOI: 10.1056/NEJMp1410741